Blog de viajes Ecuador parte 2

Esperamos que disfruten de nuestras aventuras por la Amazonia Ecuatoriana! Pero antes, sabrán sobre uno de los destinos más impactantes de este país: La Laguna Quilotoa.

Laguna Quilotoa: eterna caminata

Bajando por la carretera central de Ecuador y desviándonos hacia la sierra nuevamente, llegamos a la Laguna Quilotoa. De gran atractivo debido a su intenso color azul, se encuentra ubicada en un cráter volcánico. Al igual que Cuicocha, esta laguna se puede caminar a la redonda por el filo de sus laderas montañosas. Esta vez no emprendimos la aventura solos ya que un perro callejero nos acompañaba. Fue, sin duda, el perro que más crédito acumuló para que lo adoptemos. Pero lamentablemente una mascota conlleva responsabilidad y limitaciones a la hora de viajar en camper. Limitaciones que no estamos dispuestos a afrontar. Por un lado, los parques nacionales no aceptan mascotas. Además, en zonas calurosas no se los puede dejar solos mucho tiempo dentro de la camioneta. Y también complican las burocracias fronterizas, encareciéndolas e implicando mucho más papelerío. Este perro casi lo logra, pero nos mantuvimos firmes! (Cabe mencionar que el perro nos abandonó frente al primer grupo de turistas almorzando, pero en el regreso al camper nos recibió con la misma alegría de siempre).

El recorrido es precioso, aunque la vista sea prácticamente la misma desde distintos ángulos. Pero la verdad se nos hizo eterno. Llegamos casi gateando al pueblo desde donde comenzamos y donde pasaríamos la fría noche en el “parqueadero” de un restaurant overlander friendly.

Baños: un paso obligatorio

Con cierta tristeza partimos. Continuamos siendo solamente dos. Y fue así que llegamos a la ciudad de Baños, famosa por su turismo aventura, aguas termales, paisajes montañosos con esplendidas cascadas y variada oferta gastronómica internacional. Un icono del Ecuador es la hamaca con vista a las montañas mezcladas con nubes y volcán que se deja ver poco. Hacía 6 años que Luli había visitado este país, recordando la hamaca como un lugar tranquilo y relajante, ideal para pasar un lindo rato. Pero hoy en día, nos sorprendió la cantidad de turistas haciendo fila para que unos hombres musculosos los hamaquen al vacío. Souveniers, griterío, niños corriendo por todos lados. La famosa hamaca se puede describir de muchas formas pero definitivamente no como un sitio tranquilo.

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A la tardecita-noche, nos sumergíamos en las aguas termales que están al lado de una bonita cascada en pleno centro de la ciudad. No muy glamurosas pero cumplían con su cometido: relax aunque con un tumulto de gente y duchas calientes antes de salir a comer.

Hablando de comida vayamos a lo importante. En baños comimos en el aceptable restaurante griego (Thalassa Greek taverna), las  riquísimas arepas venezolanas de ArepasToGo, las extraordinarias hamburguesas de (Hickory Burger) y una muy rica pizza en Leoni. También probamos comida típica y regional: el hornado y el exótico cuy (cobayo de criadero). Sí, lo que en el resto del mundo es una mascota, acá se come y es un plato ancestral y algo costoso, característico de la sierra del país y del Perú. Como notarán, aprovechamos mucho de estos lugares para comer variado y rico.

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Mientras el camper descansaba frente a un céntrico parque para niños, nosotros nos tomamos el trencito turístico que nos llevó a diferentes cascadas de los alrededores, incluyendo la imponente Pailón del Diablo. A ésta se puede ingresar por dos entradas diferentes, obteniéndose distintos perfiles mediante puentes colgantes y escalones que te van acercando a la cascada.

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Para no quedarnos atrás con las tirolesas y el vértigo, visitamos el Parque San Martín, donde no solo nos lanzamos por los cables, sino que también escalamos y cruzamos por un puente colgante tipo tibetano. Todas las actividades dentro de un cañón natural.

Amazonia: un sueño hecho realidad

Era el momento de experimentar la famosa amazonia: el pulmón del planeta, tierra de los indígenas, donde la naturaleza y los animales están en su estado más salvaje.

Cabe aclarar que esta gran región también es compartida con Bolivia, Brasil, Perú y Colombia, pero elegimos explorarla en Ecuador por el excelente estado de sus carreteras pavimentadas y de fácil acceso fluvial.

Ante los excesivos precios de las excursiones en lancha o canoa para adentrarse en las profundidades de la selva, decidimos ofrecer servicio de Drone y fotografía como intercambio. Por suerte recibimos tres respuestas de lodges interesados en lo que teníamos para dar. De esta forma fue que pudimos conocer no solo tres distintos lodges, sino también tres distintas zonas bien marcadas dentro de la amazonia ecuatoriana: Yachana Lodge (en la zona de Coca), Tapir Lodge (Cuyabeno) y Sani Lodge (Yasuní). Pudimos vivir lo que los turistas (mayoritariamente extranjeros) experimentan al comprar este tipo de paquetes turísticos.

Las tres experiencias fueron muy gratificantes. Cada una aportó algo distinto a nuestro viaje que preferimos guardar con nosotros. ¿Qué aportaron en común?:

-Pudimos ver cómo viven los habitantes de la región en una geografía algo aislada del resto del país. Imaginen que para hacer unas compras en un supermercado necesitan como mínimo 2 horas de navegación, siendo imprescindible la utilización de alimentos y materias primas que tienen literalmente al alcance de sus manos (mandioca(yuca), plátano, arroz).

-Vale aclarar que estas personas no andan en taparrabo y con la cara pintada. Si bien los indios de la sierra mantienen sus vestimentas tradicionales, los indios de la selva se visten como uno (remera nike?), aunque unas buenas botas de lluvia no pueden faltar.

-El idioma quechua se está perdiendo de generación en generación. Si bien las personas mayores lo utilizan a diario, pocos son los niños y jóvenes que saben más que unas cuantas palabras.

-Si bien hay conflictos con las petroleras y los cultivos como las palmeras aceiteras, el ecosistema está cuidado mediante el turismo comunitario que trata de mantener tanto las costumbres como el habitat, al igual que sus antepasados. De todas formas, probablemente no hemos visitado los sectores más afectados por las petroleras.

–Quedamos alucinados con la fauna: tuvimos la oportunidad de ver 5 diferentes tipos de monos, gran variedad de pájaros nativos, insectos de todo tipo (no tantos mosquitos como esperábamos), el proceso de metamorfosis de las mariposas, algún que otro oso perezoso. Y los dos animales que más llamaron nuestra atención: por un lado, la imponente anaconda a un metro de nosotros; por otro, los delfines rosados exclusivos de estas aguas. Sin lugar a dudas, la amazonia ecuatoriana quedará en nuestros recuerdos para siempre.

La amazonia más accesible

Además de las costosas excursiones a los lodges, hay una amazonia más accesible económicamente:

-Desde Puerto Misahualli: donde una manada de monos conviven con los restaurantes y tiendas turísticas.

-También se puede visitar Laguna Azul, un río que curiosamente tiene un color verdoso cristalino, donde hay varios saltos de agua para explorar nadando. Este lugar es un MUST si estás por la zona.

-Desde la ciudad de Tena, junto a los chicos del hostel  Sumac Ziza, hicimos un día de kayak del cual disfrutamos muchísimo. En plena selva, nos dejamos llevar por el río, mientras un grupo de niños amazónicos que acababan de regresar del colegio en lancha, nos intentaban alcanzar. Fue llamativo como los niños estaban impactados con nuestro “ave electrónico” (drone), mientras que nosotros nos encontrábamos fascinados con su “ave mascota” (lorito), que posaba cómodamente sobre el hombro de uno de los niños.

-Desde Limoncocha, se puede hacer un tour por su laguna con gran diversidad de aves. Recomendamos tomar el tour un rato antes al atardecer para poder disfrutar de la laguna con luz, del ocultamiento del sol, y ver  por la noche al famoso caimán.

Lagarto Juancho a la vista!

-Y por último, se puede visitar las cascadas amazónicas, por ejemplo la de  “Hola Vida”, con su corta caminata y posibilidad de sumergirse bajo el potente chorro. También recomendamos dos cascadas muy cercanas entre sí: San Rafael (top ten del mundo) y la del Rio Malo, más accesible a pie, por lo que la fuerza se siente más.

-Muy cerca de la catarata Hola Vida, se encuentra la finca El paraíso, donde aprendimos el proceso del chocolate orgánico. Pero no nos fuimos sin antes tomar una chocolatada caliente y una tortita de yuca y queso (Tour + degustación final: no más de 2 dólares por persona).

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En cuanto a gastronomía amazónica, no dejen de probar el maito de pescado, que es tilapia envuelta en hojas de planta local, cocinada al carbón. De lo más exótico y para muchos un manjar (y muy saludable si se lo come crudo), el gusano del tronco del palmito. Martín se animó a probarlo pero ya cocinado, como si fuera un chinchulín. Lo que es infaltable en cada comida son la yuca (mandioca), el plátano y el arroz.

Esperamos que hayan disfrutado de nuestra sección de Amazonia Ecuatoriana! Recuerden que no se necesita mucho dinero para recorrer este sector: hay muchas actividades que se pueden hacer llegando con su propio vehículo. Cualquier cosa no duden en escribirnos!